miércoles, 26 de febrero de 2014

Servicios de ambulancias es precario en hospitales del Este.

Los pueblos del Este tienen una gran necesidad de ambulancias, pero las autoridades provinciales de cada pueblo son  verdaderas entelequias, no sirven para nada
MANUEL ANTONIO VEGA


HATO MAYOR.- Ir herido o presentar un parto de emergencia y tener que ser referido a un centro hospitalario público o privado especializado a Santo Domingo es exponerse a la muerte o quedarse a medio camino, por la falta de un adecuado servicio de ambulancia en los hospitales de los pueblos del Este, que  carecen de choferes, combustibles, desperfectos y por no existir el aparato en algunos lugares, lo que ha permitido un aumento en el número de muertes por accidentes de tránsitos.


El déficit de ambulancias en la región es de 40 unidades, para ser distribuidas solo en los hospitales y centros de salud de las ciudades, según el orden de prioridad.


Las mayorías de las unidades de servicios en poblaciones como San Pedro de Macorís, Hato Mayor, El Seibo, Sabana de la Mar, Consuelo, La Romana e Higüey están en precarias condiciones y para hacer un servicio, los pacientes y familiares tienen que costear el combustible y dejar “caer algo” al chofer.


Las unidades que aún quedan en hospitales y los subcentros de salud en los pueblos del Este son donadas casi siempre por fundaciones y gestiones políticas, pero la falta de un patronato impide que se alargue su uso, denunciándose que no se le da mantenimiento y la falta de choferes prudentes y con cierto nivel de conciencia.

Reza un viejo refrán: “A lo que nada nos cuesta, hagámosle fiesta” y esto se refleja en muchas ambulancias que llevan meses abandonadas en los parqueos de hospitales, recintos de cuerpos e bomberos y hasta clínicas en pueblos de la región.

El proceso para trasladar a un pacientes se convierte en una verdadera odisea y es más tangible cuando se presentan accidentes que hay llevar los heridos a centros especializados de la región y Santo Domingo.

Hay que hacer esfuerzos extraordinarios para conseguir una ambulancia para trasladar a un familiar a otro centro asistencial, cuyo trámite  es agotador, porque muchas veces hay que redimirse a los pies de los políticos, que son quienes mejores conservan los aparatos.

Sin embargo, las unidades de los políticos, son escasas para estos tiempos, denunciándose muchas veces que ahora no la sacan “porque no hay elecciones”

En casi igual condiciones están las ambulancias de los cuerpos de bomberos de Hato Mayor, 

El Seibo, La Romana, Higüey y San Pedro de Macorís.

Los pueblos del Este tienen una gran necesidad de ambulancias.

José Rodríguez Abreu, director regional de Salud, considera de penoso el servicio de ambulancia, atribuyendo a la falta de conciencia de muchos conductores y la falta de recursos para su mantenimiento.

"El Estado provee las unidades pero la falta de conciencia y recursos suficientes impiden el buen funcionamiento", expone.

La carencia de ambulancias en condiciones normales para transportar los pacientes es uno de los mayores problemas que confrontan los principales centros de salud de la región de la parte oriental de la isla.

Esa situación se agrava aún más por la falta de recursos económicos para la compra de los combustibles en los centros que disponen de esos vehículos.

Para el traslado de emergencia a los hospitales, familiares de personas lesionadas tienen a veces que contratar minibuses y taxis, sino es que acuden a los políticos, que siempre tienen los vehículos en mejores condiciones que los hospitales.

Ninguna policlínica en las zonas rurales del Este dispone de ambulancia, teniendo sus habitantes que trasladar a sus enfermos en colas de motores,  camionetas, camiones y hasta en patanas.

No hay comentarios: