Una mujer, de nacionalidad haitiana, tuvo en su vientre durante casi 30 años un feto que se había convertido en una bola de huesos “petrificados” de tres libras y 12 onzas.
Los médicos que la asistieron explicaron que se trató de una “litopedia”.
El extraño caso fue detectado en el hospital Luis Eduardo Aybar a Lusiani Isa, de 65 años, a quien fue necesario practicarle una cesárea para extraerle de su viente la “bola petrificada”.
El nombre litopedia significa “niño de piedra”, pues el esqueleto se había compactado en posición fetal y había adquirido una forma redonda durante las tres décadas que permaneció en el interior del abdomen de la mujer, sin causarle daños en sus órganos.
El bebé no llegó a nacer aunque el embarazo llegó a su término, según explicó la doctora Magalis Román, jefa de Ginecología del centro asistencial.
Se trata del primer caso en el país y el cuarto en el mundo.
“La paciente es una señora haitiana que vive en Haití. No se cómo vino, pero fue un hijo que la trajo al hospital.
Ella dice que su hijo más pequeño tiene 30 años y que a los ocho meses de ese parto salió embarazada y que duró con su embarazo hasta el término”, explicó Román.
La doctora dijo que según las informaciones que ofreció la señora a través de una intérprete, al ver que no paría decidió visitar médicos, curanderos, pastores de iglesias, y la barriga comenzó a ponerse más pequeña y se quedó así hasta el domingo cuando fue traída a la emergencia del hospital con un fuerte dolor abdominal.
“Eso es un embarazo ectópico, que no se desarrolla en su sitio y luego muere, sobre todo si es un embarazo abdominal, y entonces en vez de desprenderse la placenta y hacer el proceso normal, todo se va consumiendo, se absorbe el líquido amniótico y se seca”, precisó.
Licien Saint-Naurant, el hijo más pequeño de cuatro que tuvo Lusiani, explicó que su madre se quejaba frecuentemente de dolores de barriga, los cuales calmaba con remedios caseros, ya que nunca iba a un centro asistencial.
La madre no se da cuenta Para el gineco-obstetra Martín Ortiz, del Centro Médico Dominicano, éste es un caso que sólo se conoce en la literatura médica, y ocurre cuando el feto se calcifica como un papel y no causa problemas en el organismo de la madre y se da el caso de que la persona no se da cuenta.
Dijo que es frecuente cuando hay casos gemelares, uno muere y se comprime mientras el otro sigue vivo.
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